Fernanda es una chica que baila en un cabaret y todos los jueves se emborracha en recuerdo de un mal amor hasta que es invitada con su amiga Rita a la casa de Iván un vividor que las lleva engañadas con la promesa de una buena paga, pero como vive a costillas de Gustavo Adolfo, que le alcahuetea todas sus fechorías por su esposa Alba que está muy enferma y un disgusto la puede agravar, entonces este vividor se aprovecha para vivir a cuerpo de rey sin tener que trabajar.
Cuando ellas reclaman su pago y este se los niega hacen tal escándalo que despiertan a toda la casa, entre ellos a Ana Marisa la mamá de Gustavo Adolfo que ve en colorina la oportunidad de conseguir a una mujer para que su hijo tenga descendencia ya que con su esposa eso no será posible.
Pues le propone a Colorina que conquiste a su hijo y cómo anda en sequía, pues no le queda nada difícil hacerlo caer en su redes y de una queda embarazada.
La lleva a vivir a la casa de ellos para poder controlar el embarazo y para que le entregue al bebé apenas nazca, pero no contaba con que se le despertaran los instintos maternos y a la mera hora, no se quiere separar del niño, entonces recurre al ama de llaves que al principio no le simpatizaba pero que fue la única que la comprendió y con ayuda de unos plomeros amigos, pudieron sacar al niño de allí y ella huir a otra ciudad, lejos de Ana María y Gustavo Adolfo, pero en su huida se llevó los hijos de Toribio, el amigo plomero que recién estaba dejado de su mujer, que se le fue con otro, de huida de la pobreza en que vivía.
Colorina llega a la casa de una amiga del ama de llaves que la recomendó y allí recibió el apoyo de la señora que le dejó su taller de costura, teniendo que aprender el oficio, cambiando completamente su estilo de vida y con tres chinos para ver por ellos.
Mientras nadie supo para dónde se fue, así que se quedaron sin el nieto tan anhelado y así aprendió Ana maría que la plata no lo compra todo, pues fue rechazada una buena cantidad de dinero, Alma, la esposa de Gustavo Adolfo al morir le dejó a su hijo parte de la herencia que le debían entregar cuando fuera mayor de edad, por lo tanto su hermano se puso a la tarea de dar con Colorina para evitar que esta plática llegara a sus manos.
Al cabo de los años cuando los muchachos crecieron quisieron irse a estudiar a México, algo que le daba temor a Colorina, pues se podrían encontrar con el pasado que quería olvidar.
Pero como ellos no sabían nada pues llegaron donde su tío el plomero que los visitaba cada año, sólo él sabía quién era el hijo de Colorina, pero a todos los trataba igual, por lo tanto parecían trillizos y de la misma edad, ella nunca les dijo la verdad.
Estando en la ciudad le buscaron un local a su madre para que montara una boutique, a ella le entusiasmó la idea más que ahora que iban a estudiar universidad pues necesitaba más dinero para darles, así que se mudó para allá y empezó a tener gran éxito, lo cual no pasó desapercibido para el ama de llaves, que de una fue donde ella y se alegró mucho de verla de nuevo y a su hijos.
Los muchachos empezaron a frecuentar la casa de los Almazán por la joven que habían criado, era la hija de una amiga que se mató en un accidente dejándola huérfana, por lo tanto ellos se hicieron cargo de ella.
Al darse cuenta que eran los hijos de la colorina, todos tenían curiosidad por saber cuál era el heredero pero ella les dijo que todos tres eran sus hijos, se volvió a encontrar con Gustavo Adolfo que de una le lanzó los perros, pero ella se hizo de rogar un poco, pues veía que seguía bajo las enaguas de su madre y que ella seguía tan dominante como siempre.
Cuando los muchachos se dieron cuenta que uno de ellos era hijo del ricachón a alguno se le abrió las agallas y los deseo de ser el hijo perdido de esta familia, a otros no les importo y dijeron que por nada cambiaban a la madre que les tocó y por más que le preguntaban ella no soltaba prenda hasta que llegó la verdadera madre de los otros muchachos a reclamarlos y casi que ni así quería decir nada, los hizo sufrir arto para decir quién era su hijo y a Ana maría no le quedó de otra que aceptarla a pesar de que le quiso meter a otra chica por los ojos a su hijo, pero por fin se sacudió del yugo y hasta amenazó con irse de la casa si ella seguía hostigando, cuando su nieto fue a hablar con ellos, se doblegó y aceptó todo, a la colorina le dijo “ señora·” reconociéndola como su futura nuera, quedando todos felices y contentos, el plomero con sus hijos y su esposa, que al parecer ni se quería divorciar y la colorina con sus tres hijos, porque le dijo que ni creyeran que se los podían robar.
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