Esta novela empieza con la desaparición de Elisa, nadie sabe qué se hizo ni con quien salió. Al no haber noticias ni grandes ni pequeñas, la familia de ella compuesta por Adelaida, Vicente y dos hijas menores, deciden llamar al escuadrón de antisecuestros comandada por Rivas. Es el duro del paseo, es el que encuentra una ajuga en un pajar, así que se da a la tarea de escudriñar la vida obra y milagros de toda la familias León, pues cualquiera podría ser culpable.
Vicente tiene dos hermanas María Antonia y Olivia. María Antonia esta casada con Aníbal Casas, con el cual tiene dos hijos, la hija es una chica con problemas, que se hace daño ella misma sin que se den cuenta, el hijo estaba enamorado de Elisa. Olivia está casada con José Pablo, tienen un hijo, que también estaba enamorado de Elisa y tenía relaciones con ella, José Pablo resultó ser gay y dejó a Olivia por un amiguito, pero antes la dejó embarazada de una niña.
La policía investiga a toda la familia y es acusado Vicente, pues todas las pruebas llevan a creer que es el culpable de la desaparición de su propia hija, siendo encarcelado, pero encuentran una carta de Elisa donde le pide perdón, quedando exonerado de toda culpa.
Al quedar libre y mientras estaba preso, Adelaida y el detective Rivas se entendieron teniendo un romance, más que se descubrió que Vicente tenía de amante a su secretaria Isabel, parecía que todos tenían algo que ocultar. Y ¡oh sorpresa! cuando reapareció Elisa con Aníbal Casas, resultando que no hubo ningún secuestro sino que la muchachita estaba aburrida de vivir bueno y se auto secuestró, implicando en su jueguito a Aníbal, quien no se pudo negar y ella se montó en el video que se irían juntos fuera del país, pero para eso necesitaban dinero, así que llamó a su papá pidiendo un fuerte rescate por ella. Vicente se endeuda hasta el copete recogió la plata que le pedían y lo entregó, pero cuando tuvieron el dinero no supieron que hacer con él y Aníbal lo quemó, Elisa se desesperó trató de huir de él, lo hirió y María Antonia descubrió todo y la mató.
Cuando el detective Rivas la encontró herida, la llevó al hospital pero no alcanzó a decir nada, solo que la perdonaran, luego del deceso de ella, ya sabiendo donde estaba, la pregunta era ¿quién mató a Elisa?
Rivas con sus dudas se encamino a Aníbal Casas, descubrieron la relación que tuvo con Elisa, pero él negaba haberla asesinado, estuvo en la cárcel pero fue puesto en libertad por no haber encontrado pruebas de que hubiera disparado.
Toda la familia se vino contra María Antonia y ella lo defendía por ser el padre de sus hijos, además porque ella sabía que no la había matado, pero al verse acorralada, comenzó a cometer algunos errores, entre ellos mandar a matar a Isabel por celos, pues su amante se había enamorado de ella y su orgullo no lo podía permitir, así que fingiendo un asalto, la mando a matar y que pusieran el arma con la que mató a Elisa en su mano, para incriminarla a ella y como fue la amante de Vicente, casi que comen cuento.
Pero Rivas no se dio por vencido y llegó al fondo de la olla podrida, dejando a María Antonia descubierta. Huyendo como una rata, se escondió en la misma parte donde estuvo Elisa y murió de la misma forma que ella, con dos disparos en el pecho y rodando por el mismo barranco, al enfrentarse con Rivas.
Concluido este capítulo donde se creía que Adelaida y Rivas quedarían juntos, pues resulta que no, pues Adelaida no quería vivir en continua zozobra por el trabajo de Rivas, ya que con lo de María Antonia casi que marca calavera, pues los delincuentes lo agarraron y casi que lo ponen a chupar gladiolos, así que ella le exigió que dejara su trabajo si quería formar una familia con ella, a lo que él le dijo que no estaba dispuesto a dejar su profesión y que se diera otra oportunidad con Vicente que era un buen hombre. Le hizo caso y volvió con su marido quedando todos felices, adoptaron una niña recién nacida.
Telenovela colombiana producida por RCN Televisión emitida en el año 2012, siendo una adaptación de una producción chilena con el mismo nombre.
Reparto: Cristina Umaña, Jorge Enrique Abello, Anabell Rivero, Laura Perico, Juan Pablo Gamboa, Mónica Pardo y Carolina Sabino