Esta película es un enredo tras otro, con una historia que parece que va a despegar, pero termina estrellándose… literal y narrativamente.
“Alrededor de un maletín perdido” nos metemos en una trama al estilo de thriller urbano, pero con un guion que parece improvisado en la marcha y esto solo demuestra que al cine colombiano le falta todavía bastante.
Karen, el taxi, y los tiros salidos de la nada
La cosa arranca con Karen, una prostituta, que se monta al taxi de su amigo el Cachorro.
Ellos van tranquilitos rumbo a casa, cuando dos clientes piden el servicio y los suben, sin sospechar nada. Todo iba bien, charlando de la vida y de Cachorro, hasta que de la nada: empezaron a lanzarle plomo. Unos tipos armados los atacan a tiros, mejor dicho.
Los clientes resultan estar armados también y responden al fuego.
En medio del tiroteo, Cachorro resulta herido, Karen agarra el volante como puede y los otros quedan a merced de los asesinos. Resultado: todos muertos.
El maletín de la discordia
Con el carro sin frenos, se chocan y dan vueltas como trompo.
Karen logra salir y saca a Cachorro de los escombros. Ahí es cuando él ve el famoso maletín que traían los clientes y le dice que ahí está la oportunidad para cambiar sus vidas.
Karen se rehúsa, dice que mejor entregarlo al patrón, más aún cuando se enteran de que los tipos muertos eran hijos de él. Pero Cachorro insiste: si lo devuelven, los matan igual porque nadie les creerá que son inocentes.
A lo lejos suenan las sirenas, entonces hacen lo que cualquier par de improvisados haría: le prenden fuego al carro y esconden el maletín. Y es Karen la que se encarga de esconderlo muy bien.
La policía, las huidas y la tía sapa
La policía los interroga, los lleva al hospital, pero ellos sospechan que algo huele raro y se fugan. Pero no llegan muy lejos. El capitán de la policía los agarra y les exige saber dónde está el maletín.
Como no sueltan prenda, se tiran de un puente y caen sobre un camión.
Van donde una tía de Karen buscando refugio, pero la señora resulta ser una sapa nivel Dios, y llama a la policía.
Karen decide dejar a Cachorro sin decirle dónde está el maletín y va a ver al patrón, quien intenta sonsacarle la ubicación a punta de golpes. La dejan hecha un nazareno a la pobre.
Desde su lecho de martirio, Karen llama a un amigo alemán y le cuenta todo. Le pide que publique su versión, pero lo hace en alemán (porque claro, si quieres que nadie entienda, ¿qué mejor que eso?). Entonces traen a una estudiante para traducir y ver si logran averiguar dónde está el dichoso maletín.
Final estrambótico y pregunta sin respuesta
Nunca se sabe qué tenía el maletín ni si valía la pena tanto muerto.
El patrón y sus hombres mueren enfrentando a la policía. A Karen la dejan ir con la condición de no decir ni pío.
En el escondite donde tienen a la lectora del alemán con un tío de Cachorro, los dos hermanos que los vigilan se pelean, se dispara un arma, uno queda muerto y los otros se escapan.
Y justo cuando la lectora le dice al tío que ella sabe dónde está el maletín… él le apunta con un arma y justo ahí se acaba hacen el corte y salen los créditos.
Conclusión: ¿Vale la pena?
Pues sinceramente, a mí me pareció un enredo de aquellos hasta malucos. Un final todo palurdo y un argumento que se desarma por todos lados.
Un intento de thriller que no termina de cuajar. En definitiva esa platica, definitivamente, se perdió… Y luego dicen que por qué el cine colombiano no gusta tanto, si hacen estas cosas.
Ficha Técnica de la Lectora
Título original: La Lectora
Estreno: 17 de agosto de 2012
País: Colombia
Duración: 96 minutos
Género: Acción / Drama / Intriga
Dirección y Guion: Riccardo Gabrielli R.
Reparto: Carolina Guerra, Carolina Gómez, Diego Cadavid, Elkin Díaz, Héctor García, Luis Eduardo Arango, Óscar Borda, John Álex Toro, Katherine Vélez, Juan Pablo Raba
